Ese es el plazo que ha estimado el multimillonario George Soros. Unos 3 meses para arreglar todo lo que hasta ahora se ha hecho mal en Europa. El propio multimillonario no es capaz de ver una clara salida de la crisis europea si el BCE no interviene, por lo que hace un llamamiento a los dirigentes europeos para convencer a Alemania. Claro que… hasta ahora estábamos hablando de una crisis financiera y hoy por hoy ya no lo tengo tan claro. Esto es una crisis política en toda regla.
Definimos de forma sencilla una crisis financiera como la falta de dinero y un exceso de deuda, así como definimos una crisis política como una falta de hechos por parte de los políticos y un exceso de palabras de los responsables de la crisis financiera (el propio sector financiero). Puede que sea el único que se pregunte «Qué narices hace Jens Weidmann, presidente del Banco Federal Alemán (Bundesbank) diciendo lo que debe y no debe hacer el BCE e incluso presumiendo del peso que tiene dentro del BCE«. Darle peso y poder en la toma de decisiones a este hombre es similar a dejar un zorro al cuidado de las gallinas, pues la banca no puede ni debe intentar solucionar los problemas que ellos mismos han ocasionado.
Califico de irresponsabilidad la falta de acciones, tardanza en la toma de decisiones e incertidumbre que están creando los máximos responsables de la zona euro, pues cada semana que pasa con algunos países financiándose por encima de sus futuras posibilidades de pago, hace que todos los esfuerzos que se le exigen a los ciudadanos con sus «dichosas» medidas austeras sean inútiles y cada vez estemos mucho peor.
Es más, y es que para conseguir 100.000 millones de euros para sanear el sistema financiero (sin condicionalidad), se tuvieron que acordar algunos recortes (intento de recaudación de 65.000 millones de euros) que no gustaron a los mercados, provocando la subida de la prima de riesgo hasta el punto que la subida del interés que España ahora paga por colocar los bonos (y que llegó a estar por encima del 7%) hicieron que esos 65.000 millones extra que pensábamos recaudar, ahora debamos pagarlos en intereses extra. Dicho en un lenguaje académico: «Hemos hecho el G****»
El futuro de España se decide el 6 y 12 de septiembre.
El 6 de Septiembre, Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, tendrá pendientes a todos los inversores (como ya ocurrió) esperando a ver qué quería decir con eso de «Todo lo necesario para salvar el euro» y lo que él considera «suficiente». Se vislumbran 2 posibles escenarios y ambos serán decepcionantes.
Por un lado podría emplear su habitual técnica de decir algo sin decir nada y decepcionar a los mercados, los cuales aún confían en que el BCE intervenga en la compra de deuda de países periféricos con problemas. Claro que estaría la contradicción al mismo tiempo, y es que según esta entidad, podría intervenir, pero únicamente si el país en cuestión solicita formalmente el rescate.
Rajoy y Luis de Guindos aseguran que no se está estudiando pedir el rescate, por lo que deducimos entonces otros dos escenarios, y es que el BCE podría no comprar deuda (al no pedir el rescate), o podría ocurrir que el gobierno esté haciendo su habitual práctica de negar un rescate a las 4:01h y tenerlo ya negociado a las 4:02h. En ese caso, por supuesto que el rescate traería condicionalidad traducida a más ajustes, y si en España ajustamos más, nos financiaremos muy baratos en los mercados durante un tiempo, pero cuando el consumo se estanque nuevamente, y el paro se acerque a los 7 millones de desempleados, volverán a aparecer las dudas y aparecerá nuevamente el fantasma de un rescate, el cual desembocaría en el fantasma de la desaparición del euro, y todo esto podría ocurrir a mediados de 2013, no más.
Y mientras tanto en España….
España continúa sin tener Gobierno, ya que del mismo modo definiremos un Gobierno como aquella persona o grupo de personas que gobiernan a través de la toma de decisiones para mejorar la situación de los gobernados.
Para comenzar, España ha delegado o está «marionetizado» por Alemania, un país que gobierna perfectamente para sus gobernados aunque sea a costa de sus socios de la Unión Europea (llamémosle esclavos). Eso explicaría el por qué Alemania se financia en los mercados con una rentabilidad negativa mientras otros países lo hacen con intereses por encima del 6%.
Gracias a la Unión Europea, Alemania ha conseguido con la crisis financiera lo que Hitler no consiguió con la guerra. Acceder a un rescate permitiendo a la Troika entrar en nuestro país, nos introduciría en una especie de holocausto donde se intentaría sanear las cuentas cobrando un alto precio a los ciudadanos más débiles. Ya explicamos lo que la Troika haría en nuestro país llegado el momento.
Dejar entrar a la Troika es perder el país, abandonar el juego y desde luego, el fracaso de todo Gobierno, ya que parece ser que se nos olvida que esto es España, donde no sólo tenemos una selección de Fútbol ganadora, sino empresas fuertes con un modelo de negocio internacional de primer nivel, unos recursos naturales que no se están usando y que servirían para generar millones de empleos y crear riqueza en nuestros suelos y nuestros campos.
En resumen: Si el BCE finalmente no compra deuda o lo hace a cambio de más ajustes, más vale que nuestro Gobierno vaya pensando en una forma fina de mandar a Europa a la **** ya que de lo contrario, únicamente alargaremos la agonía de los españoles retrasando lo inevitable.
PD: Hay que recortar y privatizar en tiempos de bonanza. Y aunque suene repetitivo, estoy de acuerdo con Maria Dolores Cospedal, y es que ningún país ha salido de una crisis subiendo impuestos. Entonces… ¿Qué **** estamos haciendo?. CRISIS POLÍTICA.
