EstrategialiderazgoRecursos humanosTodo

Señales que indican que podrías ser un psicópata (o cualquiera de la empresa)

Hace unos meses publicábamos un estudio de Paul Babiak, el cual decía que la mayoría de los psicópatas no se encuentran internados o encarcelados, sino dirigiendo empresas (Leer: ¿Crees que tu jefe es un psicópata?, científicamente, podrías estar en lo cierto.) y es que en la definición de psicópata entran algunas características de la persona que precisamente son las que se le piden a un líder dentro de la empresa. Esto abriría también el debate sobre la pérdida de valores que una persona puede llegar a adquirir en el mundo de los negocios.
Quizás, a través de este artículo puedas comprobar si estás desarrollando algún tipo de psicopatía, si tu jefe podría encajar con las distintas definiciones o si ese compañero que tiene ganas de subir puestos en la empresa al precio que haga falta, ya podría tener este tipo de tendencias. A diferencia de lo que muchos piensan, el psicópata es una persona agradable, seductora, encantadora…. pero esa es su fachada. Del mismo modo que nos hacíamos la pregunta sobre si el talento se hacía o ya se nacía, una cosa está clara, y es que el psicópata no nace psicópata, se hace, aunque algunos disfrutan más que otros en el camino de la transformación.

1. Tienen un gran sentido de la autoestima.

En principio, ésto es una cualidad, ya que mostraría seguridad en nuestras capacidades y habilidades. Claro que para los que están desarrollando esa fase de psicopatía, esta cualidad se convierte en arrogancia y suelen pensar que son muy superiores al resto de los humanos, y desde luego, mucho más inteligentes que el resto de la plantilla de la empresa. Es lo que se llama «ser el ombligo del mundo»

Ver también:  Españoles, los más "puteros" de Europa.

2. Propensos al aburrimiento con constantes necesidades de emociones y estimulación.

El psicópata suele aburrirse con mucha facilidad, y es por eso que su terreno favorito es asumir riesgos constantemente, con la dificultad añadida de que esta persona carece de auto-disciplina, por lo que no suele acabar aquello que comienza, ya que vuelve al estado de aburrimiento rápidamente. Es en ese estado cuando suele «tocarle las narices» a los demás, buscar enfrentamientos sin sentido o llamar la atención sin ningún motivo. Cuando esta persona está en un puesto de dirección, una de sus prácticas favoritas es el Mobbing.

3. Mentiroso patológico.

Se pueden considerar mentirosos compulsivos. Lo peor es que muchas de esas mentiras no tienen nada que ver con su vida personal o profesional (que también las servirá), sino que es un experto en el diseño de rumores sobre otras personas con el fin de perjudicarlos porque sí, o por dejar a la persona en mal lugar para poder ocupar su puesto.

4. Es un manipulador nato.

Gracias a su frialdad y encanto superficial, puede lograr que algunas personas hagan cosas o actúen de forma imprudente que no harían en condiciones normales. Es un estratega nato, y en ocasiones puede poner a un grupo de personas en contra de otro, a un jefe en contra de un trabajador o a un compañero en contra de otra.

5. Falta de remordimientos y culpa.

En el mundo de los negocios, este punto lo desarrollan por obligación muchos directivos, ya que parte del trabajo de un directivo es despedir a trabajadores e intentar no pensar que esas personas tienen familia. Diariamente lo vemos en los políticos al pedir austeridad aún sabiendo que hay familias que no pueden sobrevivir. Banqueros enviando órdenes de ejecución de desahucios aún sabiendo que no tienen dónde vivir, e incluso un juez debe hacer la vista gorda para no pensar en la orden de ejecución que está dictando. Si estas personas acaban acostumbrándose a este entorno, con el tiempo son esas personas que quieren obtener beneficios sin pensar en el daño que causan en las víctimas. Un ejemplo de psicópata sería una político/a que cuando se habla los desempleados grita: «que se jodan!!»¿Os lo imagináis? 🙂

Ver también:  Twitter continua innovando. Nuevos servicios de Twitter

6. Falta de empatía.

No son capaces de ponerse en el lugar de las personas. Carecen de sentimientos hacia la gente en general, son fríos, despectivos, desconsiderados, y sin tacto.

7. Impulsivos e irresponsables.

Cuando se trata de tomar decisiones, suelen ser impulsivos. No piensan en las consecuencias de una decisión. No suelen elaborar planes. Al fin y al cabo, si no sale bien, buscarán la forma de culpar a otra persona. No se resisten a las tentaciones, por lo que suelen ser promiscuos. No dudarán en flirtear con una persona del sexo opuesto en la empresa, ya que suelen ser irresponsables y temerarios.

8. No acepta responsabilidad de sus propias acciones y se cuelga medallas que no se ha ganado.

Este es un error que incluíamos dentro de los errores que cometen los líderes. Si en la empresa algo no sale bien, culpará a su equipo de trabajo por incompetentes. Si el trabajo sale bien, se colgará la medalla con su jefe. No lo ganó el equipo, lo ganó él gracias a su experiencia como líder. Estoy seguro de que esto lo habréis visto en más de una empresa.

A. Carlos González
Autor de "Cenizas de Prosperidad", Apasionado de las ventas, las finanzas, estratega empresarial, entusiasta del desarrollo personal y algunas cosas más

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.