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12 aparentes contradicciones que son verdad; conociendo a las personas.

Hay falsas creencias en las personas que a menudo se presentan como contradicciones aparentes, pero ciertas si entramos en profundidad y que estarían dentro de la obligación de entenderlas cuando tenemos como objetivo el conocer a las personas. Sin más preámbulos, éstas serían algunas de esas contradicciones que con el tiempo, al menos desde mi propia experiencia, he podido comprobar que son totalmente ciertas. Si alguien quiere añadir alguna más o discrepar sobre alguna, siéntase libre de hacerlo.

1. Las personas que más critican un rasgo de otra persona, es porque encuentran ese rasgo en sí mismas.

Aquellos rasgos que más criticamos en otras personas, suelen ser partes de nosotros mismos que negamos. Ya hemos hablado de este punto en varias ocasiones; era lo que Freud llamaba la proyección.

Una mujer que le preocupa engordar unos kilos llamará a otras mujeres gordas, del mismo modo que aquellas personas que más critican a los homosexuales suelen ser personas que tienen dudas o problemas con su sexualidad. Ejemplo: El ex-líder del Kukus klan fue detenido mientras estaba haciendo «cositas» con una travesti de color, lo cual era todo lo que aparentemente combatía. Como siempre suelo decir: «aquella persona que está a gusto consigo misma, no pierde tiempo en criticar a los demás por su condición».

2. Cuanto más aprendes, te das cuenta de que menos sabes.

Creo que fue Sócrates el que dijo que a medida que vas a adquiriendo más y nuevos conocimientos, se van generando más dudas de las que resuelves. Y eso da lugar a otro viejo dicho: «si crees que ya lo sabes todo, es porque aún no has aprendido nada».

3. Cuanto más intentas sorprender a alguien, menos impresionados quedarán.

Supongo que a más de una persona, cuando le ha gustado un chico o chica, ha tratado de impresionar a esa persona para gustarle, y ha provocado el efecto contrario. Y es que a menudo, para impresionar a alguien debes recurrir a comportarte como la persona que no eres. Y dejar de ser uno mismo, hace que la otra persona perciba la falta de autenticidad, y por tanto, inconscientemente se produce el rechazo, pues nos gustan las cosas auténticas.

4. Las personas a las que les cuesta trabajo confiar en los demás, son de poco fiar.

Si alguna vez has conocido a una persona que dice que le han hecho mucho daño, y que por eso ya no puede confiar en una persona, prepárate para cargar con lo que yo llamo «la Semana Santa», pues si sigues adelante con la relación, cargarás con una enorme cruz. La mayoría de estas personas tienen un mecanismo de defensa que consiste en herir a los demás para evitar ser heridos.

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En otras ocasiones, cuando hablamos de asuntos de empresa, rara vez falla que esas personas que no se fían de sus compañeros y empleados, es porque creen que van a actuar de la forma que ella misma lo haría.

5. Cuanto menos te preocupas de la gente, menos te preocupas de ti mismo.

Aparentemente, las personas que no se preocupan de otras personas, pueden parecer egoístas y egocéntricos que únicamente se preocupan de sí mismos, pero lo cierto es que las personas tratan a los demás como se tratan a sí mismos. Cuando tratan a la gente como una mierda, es porque ellos mismos se consideran una mierda. Y eso es una evidencia; de lo contrario, tratarían con respeto a todo el mundo.


6. Cuanto más accesible es algo, menos interés generará.

Realmente nos atrae la dificultad. Es por eso que muchas personas acaban buscando una relación complicada con una persona complicada. Si la situación fuera fácil, no nos atraería.

7. La mejor forma de conocer a una persona especial es no necesitar estar con una persona.

Cuando necesitas a una persona a tu lado para ser feliz, realmente eres una persona incompleta, y por tanto, defectuosa. En cambio, cuando no tienes esa necesidad de estar con alguien más, eres una persona completa, y por eso gustas a la gente. Ejemplo: muchas personas habrán vivido en primera persona cómo no se comen una rosca cuando están solteros, y a las pocas semanas de estar con pareja, las oportunidades no dejan de aparecer. Tiene una explicación aún más sencilla, y es que por una parte ahora te sientes completo (y eso se percibe por el sexo opuesto), y por otra parte, ahora no buscas; por tanto encuentras. Esto nos lleva al siguiente punto.

8. Cuanta más presión tengas por lograr algo, menos probabilidad de lograrlo tendrás.

La presión es el mal de todo cumplimiento de objetivos. Es por eso que cuando en las empresas buscan a «alguien acostumbrado a trabajar con presión», realmente no tienen ni idea de lo que están buscando. Eso que mucha gente llama presión, para unos pocos es su zona de confort, su campo de juego ideal. Todo lo demás sería aburrido para ellos. Es lo que en el mundo de las ventas denominamos como personas de acción. Otra cosa es buscar a una «persona acostumbrada a trabajar por objetivos».

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Y ésto ocurre por una sencilla razón; el cerebro no toma buenas decisiones cuando se siente presionado, y a veces, el desear algo con tanto ímpetu y prisa, hace que nos saltemos pasos que requieren paciencia. La presión te lleva a buscar atajos, y los atajos, por regla general te conducen al lado contrario de donde quieres llegar.

9. Hablar de tus errores y defectos, te hace parecer más perfecto.

Me costó mucho tiempo llegar a esta conclusión, pues como toda persona, quizás equivocadamente, intentaba sorprender a la gente hablando de mis logros y de mis virtudes. Cuando comencé a mostrar mis defectos en primer lugar en mis citas, noté cómo ganaba atractivo e interés, pues la otra parte se sentía más cómoda de mostrarse tal y como era. Aquellas cosas que para algunos significaría mostrar debilidades, con el tiempo descubres que te hacen mucho más grande como persona.

Y eso lo he aplicado en todos los campos de mi vida, incluso en mi vida laboral. De hecho, alguien me dijo una vez: «cuidado con esas personas que aparentemente no tienen defectos, pues sus defectos entonces deben ser enormes e inconfesables».

10. La mejor forma de alejar a una persona es esforzarte en que no se separe de ti.

Probablemente el mejor ejemplo sea una persona celosa, la cual tiene tanto miedo de perder a una persona, que acaba perdiéndola por su comportamiento. Pero os voy a contar una historia tan cómica como verídica de un tipo al que conocí hace tiempo:

«Era un tipo muy atractivo, con cero dificultad de llevarse a la cama a prácticamente cualquier chica que ponía en su objetivo. El problema es que muchas de estas chicas se quedaban pilladas por él, y él no quería ninguna relación seria; pero no era el típico «cabrón» sin sentimientos; él lo pasaba mal cuando se daba cuenta de que esas chicas lo pasaban mal. Y un día cambió su estrategia a raíz de leer un libro que no recuerdo ahora mismo, y que hablaba de la psicología femenina.

A partir de entonces, cuando se llevaba a la cama a alguna chica, seguidamente le decía que se había enamorado de ella; que pensaba que era su alma gemela y que se la imaginaba como la madre de sus hijos. Con todo ésto y unos cuantos adornos románticos más, ahora eran las propias chicas las que no querían volver a saber nada de él».

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Moraleja: ¿Quieres que alguien se aleje de ti?, haz todo lo posible por mantener a esa persona cerca.

11. Todo el mundo pide sinceridad, pero no les gustan las personas sinceras.

La gente, por regla general quieren que les digas la verdad, pero su mecanismo de pensamiento se pondrá a la defensiva si tu verdad no es la que ellos querían escuchar. Un sencillo ejemplo: una amiga tuya se hace un cambio de look y te pregunta: «¿qué te parece?», respóndele que no te gusta, y notarás una mirada como si hubieses matado a un familiar suyo.

Es por eso que las personas de mi círculo íntimo se lo piensan dos veces antes de pedirme opinión, pues saben que para bien o para mal, voy a ser muy sincero, pero al mismo tiempo, saben que cuando necesiten una sincera opinión, no les voy a hacer un regalo para sus oídos. 
12. Las personas quieren opiniones objetivas, pero no les gusta la objetividad.
Cuando hay 2 bandos, el ser objetivo significa buscar las cosas buenas y malas de cada bando. Curiosamente, ninguno de los 2 bandos agradecerá tu punto de vista objetivo; por el contrario, te convertirás en enemigo de los 2 bandos. De esto mismo hablaba Maquiavelo.
Y básicamente, así son la mayoría de las personas. Realmente, las personas creen que saben lo que quieren; pero no lo saben. Creen que saben lo que buscan; pero no lo saben. Creen que se conocen a sí mismas; pero no tienen ni idea de cómo son en realidad, aunque presumen diciendo que son de una forma que dista mucho de cómo son en realidad.
Y por eso, conocer a las personas mucho mejor de cómo se conocen a sí mismas es una gran ventaja para acercarse a ellas en cualquier campo, tanto si hablamos de relaciones sentimentales como de negocios.
Todo el mundo cree que es especial o que conoce a una persona muy especial, pero lo cierto es que todo el mundo realmente es muy simple, y todos tenemos una psicología similar ante circunstancias y hechos similares.
A. Carlos González
Autor de "Cenizas de Prosperidad", Apasionado de las ventas, las finanzas, estratega empresarial, entusiasta del desarrollo personal y algunas cosas más

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