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Cómo pasó Tony Robbins de una dura infancia a crear un imperio de 1.000 millones de dólares.

A menudo existe la falsa creencia de que la mayoría de los millonarios lo son porque sus anteriores generaciones eran familias millonarias. Si bien es cierto en los casos similares a los Rockefeller, más cierto aún sería decir que hoy día, los actuales millonarios que componen la lista Forbes procedentes de familias ricas, son prácticamente una ridícula minoría. El resto provienen de familias de clase media e incluso de familias que en algún momento tenían problemas para subsistir.

En el caso de Tony Robbins, decir que tuvo una vida muy dura, sería únicamente un eufemismo, pues cuenta en su libro «Controle su Destino» cómo incluso en acción de gracias, los vecinos le regalaban comida a su familia para que pudieran cenar decentemente.

Hoy día, muchas personas prefieren consolarse diciendo que ellos no pueden tener éxito en la vida ni lograr grandes cosas por proceder de la pobreza o por no tener a una familia bien posicionada. En el caso de Tony Robbins, él asegura que precisamente todos esos obstáculos y toda esa miseria fue lo que le impulsó a convertirse en uno de los autores más vendidos, en un multimillonario, y en un coach que ha asesorado a Bill Clinton, a gestores de fondos de inversión y a deportistas de la talla de Serena Williams.

(Ver: Tony Robbins: El secreto simple hacia la riqueza)

«Si yo no hubiera sufrido tanto, yo no hubiera estado hambriento de éxito. No habría sabido entender el sufrimiento de otras personas. Aquello me despertó el deseo de entender a la gente y ayudar a crear el cambio como yo lo hice», dijo Tony Robbins recientemente en una entrevista.

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Y es que las personas llegan a sentir pena de sí mismas, cuando debemos usar las malas situaciones y los reveses de la vida como trampolín para el éxito.

«Nuestros peores desafíos, nuestros peores problemas, nuestros peores fracasos, para aquéllos que no se dan por vencidos, te dan lecciones y puntos de vista», dijo.

El éxito de Tony Robbins no pasaba por asistir a la Universidad, pues para Robbins, hay una enorme diferencia entre la escolarización y la educación, entre estudiar y adquirir conocimientos útiles.

Robbins contaba en Controle su Destino cómo antes de los 25 años ya había leído más de 700 libros sobre la psicología del cerebro humano, sobre aquello que nos hace felices y sobre todo lo que tenía que ver con nuestra capacidad para lograr el éxito, y no desde un punto de vista de energía cósmica, sino desde nuestra propia masa cerebral.

«Trabajar más duro, te dará más éxito en la vida», es otra de las premisas de Robbins.

Cuenta cómo para adquirir de una forma más rápida la habilidad oratoria (hablar en público), Robbins llegó a hablar en público hasta cuatro veces al día para, de esta forma, en unos pocos meses, superar en horas a aquellos oradores que llevaban años hablando en público.

«El secreto de la vida de cualquier empresario se encuentra en agregar más valor, y hacer más de lo que nadie está haciendo en el mercado».

«Todo el mundo experimenta el miedo en algún momento. A algunos les paraliza, mientras que otros consideran crucial enfrentarse a esos miedos acabar con ellos».

Y no se trata de no sentir miedo, sino de actuar a pesar de sentir el miedo. «Cuanto más te enfrentas a tus miedos, más fuerte te vuelves y menos miedos te quedan», dice Robbins.

Ver también:  10 pasos para mejorar tu negocio en 2013.

(Ver: El mejor consejo de dinero y negocios que Tony Robbins recibió a los 24 años)

Con respecto a la gestión de los fracasos, Robbins asegura que no existe nadie que haya tenido un éxito masivo sin haber tenido grandes fracasos, pues las únicas personas que nunca han fallado en nada, precisamente son aquellas que nunca han hecho nada. Y el fracaso, una vez llega, hay que tomarlo como lección.

Los tres consejos clave de Tonny Robbins para los empresarios.

1. No inicies un negocio a menos que sea tu vida y tu pasión y que sea lo que harías aunque no te estuvieran pagando.

2. Encontrar la forma de entender a tus clientes más de lo que ellos mismos se conocen.

3. Hacer más por esas personas de lo que cualquier otro negocio está haciendo. Añadir más valor. Si haces ésto, tendrás clientes incondicionales.

Ver; Estas son las 6 áreas de tu vida que debes dominar para controlar tu destino, por Tony Robbins

A. Carlos González
Autor de "Cenizas de Prosperidad", Apasionado de las ventas, las finanzas, estratega empresarial, entusiasta del desarrollo personal y algunas cosas más