Todo el mundo tiene una habilidad, y la de Luis Von Ahn es construir sistemas de negocio que te ofrezcan un producto o servicio gratis y beneficiarse de ello. Lo más probable es que le hayas aportado beneficios sin que lo sepas.
Una de sus primeras ideas de negocio fue con 12 años. La idea consistía en un gimnasio gratuito para los usuarios. Von estudió que la gente que se ejercita en las máquinas puede generar energía, y por tanto, podía ofrecer un gimnasio libre de cuotas de inscripción, conectar todas las máquinas a una red eléctrica y vender la energía producida a una compañía eléctrica. Y la idea era muy buena, ya que… ¿no se apuntaría más gente a un gimnasio si la inscripción fuera gratis?. Von aprendió la primera lección de marketing de su vida, y es que si nos ofrecen algo gratis, no lo queremos. Realmente la gente quiere pagar, por lo que este joven empresario tuvo que desistir en su idea.
Pero Von, el cual es ahora profesor de ciencias informáticas en la Universidad de Carnegie Mellon, no ha cesado en sus intentos de construir modelos de negocio innovadores basados en ofrecer el producto gratis y ganar dinero con ello. De hecho, durante los últimos 8 años, Von ha vendido 2 proyectos a Google, por una cantidad que según Business Insider está comprendida entre los 10 y los 100 millones de dólares (gran horquilla de precios).
Gracias al auge de internet, Von pensó en la forma de beneficiarse del poder de millones de mentes humanas. Claro que más allá de su beneficio propio, se encuentra el beneficio que genera en el resto. Este empresario sí puede decir que ha trabajado para hacer un mundo mejor.
Uno de sus productos fue Duolingo.
Duolingo es una plataforma para aprender idiomas de forma gratuita. Von observó cómo en muchos países latinos, la gente quiere aprender idiomas, pero con ese alto nivel de pobreza muchos no se pueden permitir pagar las cuotas de una academia. Con Duolingo, los usuarios (que ya se cuentan por decenas de millones), ayudan a traducir Internet.
El sistema de Duolingo hace posible que los usuarios vayan aprendiendo idiomas de una forma fácil y por distintos niveles, donde cada frase que emplean es para su posterior traducción de la web. Es decir, Von aprovecha la tecnología, y de una forma divertida hace que los usuarios de todo el mundo, con pequeñas «dosis» de su tiempo, de forma colectiva, estén colaborando con una traducción que llevaría probablemente cientos de años hacerla de otra forma. A cambio, los usuarios aprenden un idioma de forma gratuita.
(Leer: Cursos de idiomas online gratis)
Re-Captcha.
Luis Von Ahn es el inventor de los Captcha. Los captchas son esas palabras que aparecen en los formularios o comentarios, y que están para evitar el spam de las máquinas automatizadas. Von aprovechó esas millones de veces que millones de personas de todo el mundo usan los captchas para ayudar a traducir libros antiguos.
Habrás observado que los captchas suelen estar compuestos por dos palabras. Pues bien, una de esas palabras es el escaneo de una palabra de un viejo libro que no puede traducir un software, y por tanto, debe hacerlo un humano.
Re-Captcha fue comprada por Google.
En 2004 también ideó una aplicación que aparecía en forma de juego, donde se asociaban imágenes entre sí. Este juego ayudaba a etiquetar fotos para los buscadores y detectar el contenido inapropiado. Google no tardó en comprar ese invento para relanzarlo como Google Image Labeler, lo cual le ayudó para evitar problemas con las imágenes y al mismo tiempo ordenarlas por temáticas.
Y en eso consisten los negocios de este joven empresario: dar algo gratis, divertido y productivo, mientras que con uso estás solucionando un problema existente. Y por qué no, de paso se le vende a un gigante como Google por unos cuantos millones.
Puedes ver la charla de Luis Von Ahn en TED en Español en el siguiente vídeo.
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