No existe una única teoría de la iniciativa empresarial, y algunos empresarios tienen éxito y otros no. Aunque los tiempos han cambiado, lo cierto es que el mundo de los negocios sigue consistiendo en lo mismo.
Tanto si eres un empresario cuyo negocio vende calcetines como si vendes estructuras metálicas o servicios para las webs, estas 9 características, podría decirse que son universales para tener éxito en los negocios. Lo fueron antes y lo siguen siendo hoy día.
1. Adaptabilidad y flexibilidad.
Es bueno ser un apasionado de lo que haces. Pero ser inflexible acerca del cliente o de las necesidades del mercado te conducirá al fracaso. Hay que saber adaptarse a los cambios. Recuerda que una aventura empresarial no se trata simplemente de hacer lo que crees que es bueno para tu negocio, sino también hacer negocios exitosos fuera de él.
Las necesidades del mercado son dinámicas: los cambios son un fenómeno recurrente. Los empresarios de éxito dan la bienvenida a todas las sugerencias para la optimización o personalización que mejore su oferta y las necesidades para satisfacer a los clientes y al mercado. Un producto no puede ser sólo un pasatiempo para ti, sino un producto que satisfaga las necesidades del mercado.
2. Entender la oferta y el mercado.
Los empresarios conocen su oferta de productos por dentro y por fuera. También conocen el mercado y su dinámica por dentro y por fuera. Permanecer al tanto de las necesidades cambiantes del mercado, los movimientos de la competencia y otros factores externos puede evitar grandes fallos. Hay buenos productos que no tienen mercado, y grandes mercados con demasiada competencia de oferta, donde hay que adaptar el producto a todos los niveles o decidir quedarnos fuera.
3. Pasión y motivación.
La única palabra que describe el requisito básico para una aventura empresarial es «Pasión». Como decía Donal Trump: «Nada grande se ha logrado en el mundo sin pasión».
Tu demostración de la pasión y la motivación determinará tu éxito en cualquier proyecto empresarial. Desde la construcción e implementación de un prototipo, a lanzar tu idea a los capitalistas de riesgo, el éxito es una función de la pasión y la determinación.
4. Asumir riesgos.
Como dice Michael Bloomberg :» La vida es demasiado corta para pasar tu tiempo evitando el fracaso».
Los empresarios son tomadores de riesgos listos para sumergirse profundamente en un futuro de incertidumbre. Pero no todos los tomadores de riesgo son empresarios de éxito. ¿Qué diferencia a un empresario de éxito del resto en términos de riesgo? Los empresarios de éxito arriesgarán tiempo y dinero en proyectos desconocidos, pero ellos también mantendrán recursos y planes para asumir proyectos desconocidos en reserva. Al evaluar el riesgo, un empresario exitoso se preguntará a sí mismo, vale la pena asumir este riesgo costandome tiempo, dinero y esfuerzo? Y, ¿qué voy a hacer si esta empresa no paga?
(Leer: Cómo fracasar en los negocios sin perder la dignidad)
5. Confianza, trabajo duro, dedicación y disciplina.
«No tienes que ser un genio, un visionario o incluso un graduado de la universidad para tener éxito. Sólo se necesita un sueño y ponerse a trabajar en conseguirlo».
Los empresarios disfrutan lo que hacen. Ellos creen en sí mismos y tienen confianza y dedicación en su proyecto. En ocasiones, pueden mostrar terquedad en su intensa concentración y en la fe que tienen en su idea. Pero la otra cara es su disciplina y dedicación demostrada.
6. Gestionar bien el dinero.
Se necesita tiempo para conseguir una rentabilidad en cualquier proyecto empresarial. Hasta entonces, el capital es limitado y debe ser utilizado con prudencia. Los empresarios de éxito se dan cuenta de este requisito obligatorio de la administración del dinero y el plan de obligaciones financieras actuales y futuras. Incluso después de la obtención de fondos o de estar en pleno funcionamiento, un empresario exitoso mantiene un control completo sobre los flujos de efectivo, ya que es el aspecto más importante de cualquier negocio.
(Ver: Este es el principal error que siguen cometiendo los propietarios de pequeños negocios: mezclar las finanzas personales con las del negocio)
7. Planificación.
El espíritu empresarial va sobre la construcción de un negocio desde cero, mientras se gestionan los recursos limitados (incluyendo el tiempo, el dinero y las relaciones personales). Se trata de un compromiso a largo plazo, que se trata de planificar lo más posible desde el principio. En realidad, sin embargo, la planificación de todo y tener una solución lista para todos los posibles riesgos puede evitarte incluso dar el primer paso. Los empresarios de éxito mantiene un poco de «polvo seco» en reserva, pero lo más importante es que mantienen la mentalidad y el temperamento para ser capaces de lidiar con posibles imprevistos.
Hay que hacer un análisis de viabilidad; identificar los umbrales de tiempo y capital; empezar el negocio con recursos limitados…etc. Si se cruzan tus umbrales, busca alternativas y estate preparado para tomar la siguiente salida.
8. Habilidades sociales.
Muchas personas buscan consuelo en amigos, colegas, vecinos…etc, que están contentos de que los escuchen quejarse de la desaceleración mundial, la falta de demanda, o la competencia desleal entre otras cosas; pero eso no va a mejorar nada. Los empresarios de éxito alcanzan a los mentores con más experiencia y extensos contactos para obtener consejos valiosos.
Tener este tipo de contactos, incluyendo más mentores experimentados, es una característica clave de los empresarios de éxito.
(Leer: ¿Quieres ganar más dinero que la media?, habilidades sociales y matemáticas te ayudarán)
9. Estar preparado para salir a tiempo.
No todos los esfuerzos se traducirán en éxito. Por desgracia, la tasa de fracaso de proyectos empresariales es muy alta. A veces, es mejor salir a tiempo y probar algo nuevo, que continuar haciendo gastos innecesarios que no vas a poder recuperar. Muchos empresarios de éxito no tuvieron éxito la primera vez, pero tenían la serenidad y la previsión para saber cortar cuándo cortar sus pérdidas.
Como dice Richard Branson «No se aprende a caminar siguiendo las reglas. Se aprende andando, cayéndote y volviéndote a levantar».
Leer: 10 cosas que nadie te dice cuando emprendes un negocio
