emprendedoresnegociosricosTodo

Cómo hacer 1 millón al año en los negocios, según algunas personas que lo han conseguido.

Lo cierto es que 1 millón aún es una cantidad de dinero nada despreciable, pero….. si quieres alcanzar este hito y no tienes pensado recibir una herencia en el corto plazo, va a ser obligada la iniciativa empresarial.

Como ya hemos dicho en otras ocasiones, podemos alcanzar la cifra de 1 millón trabajando por cuenta ajena, ahorrando, invirtiendo y esperando que el interés compuesto haga el resto, pero de esa forma no sería 1 millón anual, y tampoco sería algo rápido, sino algo más lentamente progresivo (que tampoco está mal).

Imagen: Heidi Burkhart | progressinlending

Puesto que yo aún no he conseguido hacer 1 millón de euros, vamos a ver qué tienen que decirnos algunas personas que logran hacer 1 millón cada año en sus «pequeños» negocios (o al menos un día fueron pequeños).

1. El amor a tus clientes.

Todo lo que hagas debe centrarse en el cliente, pues evidentemente, no existe ni una sola empresa que pueda sobrevivir sin clientes. Esta fue la filosofía empresarial de Tim Nguyen, co-fundador y CEO de BeSmartee, una empresa que ya genera más de 2 millones anuales.

Una vez sabemos que el cliente es nuestro mayor activo en el negocio (de hecho, nuestro negocio es el cliente), céntrate únicamente en el cliente. No en tus beneficios, sino en el beneficio del cliente. 

Si estás pensando cerrar tu empresa para las vacaciones, pregúntate cómo afectará eso a tu cliente. Si estás pensando en recortar personal en tu empresa, pregúntate cómo afectarán los recortes a tus clientes. No te preocupes por las ventas, ni te enfoques en el dinero. Preocúpate por tus clientes, y enfócate en tus clientes. El dinero llega de esa forma mucho más rápido que si lo buscaras directamente.
2. Céntrate en los productos y las métricas.
Puede parecer contradictorio con el punto anterior, pero es que si queremos cuidar de nuestros clientes y ofrecerles lo mejor, vamos a tener que crear un producto o un servicio impresionante. De esta forma, nos estamos enfocando directamente en nuestros clientes.
Me gustó el consejo de Simon Slade, CEO y co-fundador de Affilorama, el cual hablaba de elegir una métrica sencilla para medir el progreso de nuestro negocio. Slade decía: «Usa como métrica las unidades que has vendido o los ingresos, y siempre busca batir el objetivo de ayer cada día».
Es decir, cada día vende más que el día anterior. Busca cada día nuevos clientes para ayudar con tu producto o servicio. Recuerda que si tu negocio no está creciendo, poco a poco está muriendo. Así que busca una estrategia de crecimiento que sea sostenible en el tiempo y cada mes que tu negocio no crezca, acostúmbrate a darle la misma importancia que a una pérdida.
3. Comprende los temores de los usuarios.
Ted Leonhardt es un experto en negociación y escritor, que reconoce haber hecho más de 1 millón en ingresos algunos años. ¿Cuál fue su secreto? Comprender los miedos de las personas y entender el miedo que acompaña a una persona cuando se enfrenta al gasto de una gran suma de dinero.
Por tanto, su estrategia consistió en la compresión de los problemas interpersonales de ciertos grupos sociales (se necesita identificar el problema para vender la solución), ayudar a los clientes a reducir su miedo y ayudarles a cumplir sus metas.
En definitiva, Ted se centró en los clientes (en los miedos y necesidades de sus clientes) y los millones vinieron después.
4. Ejercita el músculo empresarial.
En ocasiones, la iniciativa empresarial funciona de la misma forma que hacer crecer los músculos, y es que probablemente nos debamos «machacar» antes de ver los resultados, pero los resultados llegan si seguimos machacándonos.

Heidi Burkhart, hoy presidenta de Dane Professional Consulting Group, dice que comenzó a los 21 años en el mundo del corretaje de los bienes raíces comerciales.

«Pasé mis primeros 3 años trabajando casi 24 horas los 7 días de la semana, sobreviviendo como podía…. pero en el cuarto trimestre de mi tercer año, por fin comencé a cerrar tratos. Desde entonces, mis ingresos han estado de forma consistente en las seis cifras, con algunos períodos donde produzco más de 1 millón».
En ocasiones, parece que no avanzamos, pues visitamos a 100 clientes, donde 50 de ellos nos dicen que NO, mientras que los otros 50 aún no están decididos. Volvemos a visitar a otros 100 nuevos clientes y ocurre lo mismo, pero en algún momento comienzan a caer clientes de aquí y de allá (siempre y cuando sigamos teniendo una estrategia), y en algún momento, nuestro duro trabajo comienza a dar resultados constantes.
No obstante, también debemos saber cuándo estamos siendo persistentes y cuándo estamos siendo cabezotas y estúpidos, siendo lo más inteligente (a veces) cambiar de negocio. Pero no hay éxito sin persistencia.
5. Construir relaciones personales.
Si bien decimos que no hay que hacer ventas, sino clientes… vamos a más allá, y convierte a tus clientes en casi amigos.
Ya hablamos de cuál fue el secreto del mejor vendedor de coches del mundo. Es el mismo que el de Andrew Royce, CEO de Royce, el cual reconoció que hace más de 6 millones al año, únicamente teniendo claro que la construcción de relaciones duraderas es lo más importante para los negocios.
Royce dice que su empresa se basa en la interacción humana con el usuario final y que intentan mantener relaciones personales con cada uno de sus clientes, donde algunos son como parte de la familia de la empresa. De hecho, se sienten orgullosos de poder decir que su empresa es más una familia que un negocio que sirve a todo el mundo.
6. Enfócate en el objetivo final.

Zach Halmstad, fundador de JAMF Software, dice que el mejor consejo que le dieron fue: 

«Mantente enfocado en lo que quieres ser y no en lo que podría salir mal. El 99% de las cosas que te preocupan casi nunca suceden».
Y es que si bien debemos conocer los riesgos a los que nos enfrentamos (que suelen existir muchos en los negocios), lo cierto es que, como creyente del enfoque que soy, parto de la base de que aquello en lo que te enfoques, es lo que vas a conseguir.
No te enfoques en no fracasar, porque vas a fracasar. Céntrate en tener éxito, y aumentarás las posibilidades de conseguirlo. Siempre lo comparo con un equipo de fútbol; Si sales a jugar para no perder, difícilmente ganarás. Por tanto, sal a ganar o quédate en el banquillo.
Por tanto, estoy de acuerdo en que la mayoría de las cosas que nos preocupan, casi nunca suceden, y deberíamos preocuparnos mucho más por hacer que sucedan otras muchas cosas.
A. Carlos González
Autor de "Cenizas de Prosperidad", Apasionado de las ventas, las finanzas, estratega empresarial, entusiasta del desarrollo personal y algunas cosas más

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.