Hoy día, tenemos facilidad a la hora de invertir en bolsa incluso hasta el punto de saber a ciencia cierta cuánto será el máximo que vamos a perder. En eso consiste la orden «Stop Loss» y aún sonando de maravilla la proposición, no todo son ventajas.
El Stop Loss es una orden condicionada de venta, en la que el inversor pacta de antemano con su «Broker» cuándo quiere parar el proceso de caída del valor de una acción. En pocas palabras, el Stop Loss sirve para no perder más de un 2-5% de rentabilidad.
De esta forma, si inviertes, por poner un ejemplo, 1,000€, el Stop Loss te permite y asegura que tu pérdida no séa mayor de 100€. Una vez que la acción baje hasta el punto de rentabilidad mínima, se manda una orden de venta al mercado de valores. De esta forma se limita el riesgo.
Ahora bien, si como ventaja tenemos el limitar las pérdidas, en muchos casos se dá que por tener el Stop Loss, los inversores dejan de ganar cantidades de dinero considerables, ya que hay que tener en cuenta, que las acciones suben, bajan, vuelven a subir y vuelven a bajar…….
Ultimamente está muy recomendado por los brokers y analistas, aunque personalmente pienso que un Stop Loss es para alguien que va a hacer una apuesta y no una inversión o para un principiante, ya que está muy enfocado al corto plazo y es por eso que esta orden hace que perdamos rentabilidad a largo plazo( en algunos casos).
Por otra parte, cada vez más personas se plantéan un problema añadido con el Stop Loss, ya que es como si el mercado tuviera información privilegiada al saber que llegado a un precio mínimo, dichas acciones se venderán provocando una nueva subida del valor.
En fín, si nunca has invertido y estás pensando en hacerlo, sin duda, esta es una solución para que pierdas el miedo de tener unas pérdidas considerables.
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