Controlamos nuestro cuerpo, pero nuestro cuerpo también nos controla, y es por eso que debemos estar muy atentos a los secretos del lenguaje corporal. Simples gestos, posturas sencillas… las diferentes investigaciones muestran que cada persona hace un impacto dramático en la forma de pensar y sentir
Pero eso no significa que tengas que ser un atleta o contorsionista para tomar ventaja en eso. Tú puedes ser tú mismo.
Nos vamos a basar en una recopilación de técnicas de Jeff Haden, el cual ha recopilado algunas de las técnicas probadas que se usan con respecto al lenguaje corporal.
Estas son 8 formas de ser una mejor versión de ti mismo a través del lenguaje corporal.
1. Túmbate, y serás más creativo.
Según el profesor Darren Lipnicki,de la Universidad Nacional de Australia, estar tumbado puede conducir a avances creativos.
«Podría ser que tenemos nuestros pensamientos más creativos mientras tenemos nuestra espalda apoyada», dice. Una de las razones podría ser que más de la noradrenalina química es liberada mientras estamos de pie, y la noredrenalina podría inhibir nuestra capacidad de pensar creativamente».
No es casualidad que el personaje de ficción Don Draper, el genio creativo en Mad Men, se tumbara en el sofá para que las buenas ideas le vinieran a la mente, y parecía encontrar en ese momento justo la idea que estaba buscando.
2. Cruza los brazos, serás más decidido.
Por extraño que parezca, cruzar los brazos hará que tengas un mejor desempeño en los problemas que tienen solución.
Eso es definitivamente fresco, porque la persistencia es un rasgo de los empresarios más exitosos que hay.
Cada vez que te sientas atrapado, pega los brazos contra el torso. Y luego sigue empujando hacia adelante.
3. Párate como Superman, te hará ganar confianza.
Según la profesora de Harvard, Amy Cuddy, a dos minutos de la presentación de una ponencia -de pie, sosteniendo sus brazos hacia afuera o hacia el cielo, o de pie como Superman con las manos en las caderas- aumentarás considerablemente tu nivel de confianza.
(Ver: 6 trucos para parecer más confiado cuando hablas en público aunque carezcas de confianza)
Prueba esto antes de entrar en una situación en la que sabes que te sentirás nervioso, inseguro, o intimidado. (Sólo asegúrate de que nadie está mirando para que nadie piense que se te ha ido la pinza).
Ya hablamos de este tipo de posturas en un anterior artículo; básicamente son posturas de poder (de gran alcance) que te hacen parecer confiado, aún cuando careces de confianza, y según, Amy Cuddy, si aparentas confianza con tu cuerpo, engañas a tu mente para que adquiera confianza.
Recomendado: Cambios en el lenguaje corporal para no sólo fingir, sino para convertirnos
4. Sonríe, reducirás el estrés.
Tener el ceño fruncido, hacer una mueca, y otras expresiones faciales negativas le señalan a tu cerebro que lo que estás haciendo es difícil. Así que tu cuerpo responde liberando cortisol, lo que eleva tus niveles de estrés.
El estrés genera más estrés y eso no te conviene.
La solución es sonreír. Sentirás menos estrés, incluso si no cambia nada la situación. Y además, cuando sonríes, otras personas sienten menos estrés también. Así que nada mejor que aliviar las tensiones con una sonrisa. El primer paso para mejorar el lenguaje corporal comienza con sonreír
La sonrisa es el rasgo más característico de Richard Branson.
5. Inclina la cabeza un poco, mostrarás que estás a gusto.
Inclinar la cabeza levemente cuando conoces a alguien muestra deferencia y humildad, y ayuda a eliminar las diferencias percibidas en el estado anímico.
La próxima vez que conozcas a alguien, inclina la cabeza ligeramente hacia adelante, sonríe, haz contacto visual, y muestra que estás encantado de conocer a esa persona.
6. Imita a otras personas, entenderás sus emociones.
Suena extraño, pero la investigación muestra que la imitación de las expresiones no verbales de otras personas puede ayudar a entender las emociones que están transmitiendo.
Ya que todos expresamos nuestras emociones no verbales, copiando esas expresiones, afecta a nuestras propias emociones, debido a un «mecanismo de retroalimentación aferente».
7. Cambia la postura, reducirás conflictos.
Cuando las tensiones son altas, estar de pie frente a frente con otra persona hace que parezca que hay confrontación.
Cuando lo que tienes que decir puede hacer que otra persona se sienta desafiada, cambia los pies apoyándote un poco en el otro pie o siéntate en un ángulo.
Sólo cambiar a ese ligero ángulo, reducirá implícitamente cualquier confrontación percibida y puede hacer que una conversación incómoda sea más llevadera, o al menos, reducir las posibilidades de que termine en altercado.
8. Mastica chicle, te hará estar más alerta y en mejor estado de ánimo.
Masticar chicle puede parecer algo poco profesional. Sin embargo, un elevado número de estudios muestran que el chicle puede hacer que estés más alerta, mejorar los tiempos de reacción, mejorar la atención selectiva y sostenida, y mejorar tu disposición.
Masticar chicle también se encontraba dentro de los trucos para superar el miedo y la ansiedad, pues el cerebro asociaba el chicle a la comida, y rara vez una persona se pone a comer mientras lo persigue un león.
Así que la próxima vez que necesites resolver un problema o necesites urgentemente que la creatividad venga a ti, acuéstate, cruza los brazos y mastica un chicle. Tal vez, esa es la combinación que necesitas para obtener éxito en la resolución de ese problema difícil.
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