Está claro que un recién graduado carece de experiencia laboral, salvo algunas prácticas de empresa que haya podido hacer mientras estudiaba y otros trabajos complementarios que por regla general no tienen nada que ver con la actividad que debería realizar dentro de la empresa. Es por eso que un recién graduado, a la hora de enfrentarse a una entrevista de trabajo, lo hace en un campo de juego con distintas «reglas» al resto.
La firma Millennial Branding ha elaborado un estudio en el que han participado más de 220 empresas, donde algunos empleadores se han quejado de la falta de preparación de los recién graduados, así como la falta de aptitudes y algún que otro fallo en el candidato. Por tanto, ¿qué busca una empresa en este tipo de candidato?.
1. Una persona madura con una cuenta de Facebook que, a ser posible no avergüence ni su imagen ni la de la empresa.
8 de cada 10 empleadores encuestados han reconocido que antes de contratar a un candidato, investigan sus perfiles sociales: cuenta de Facebook, Twitter, Linkedin y blog, en caso de que el candidato tenga uno.
Se parte de la cada vez más «falsa base» de que nadie puede juzgarte en tus actuaciones fuera de tu horario laboral. Si accedes a un puesto de responsabilidad dentro de la empresa y 4 de cada 10 fotos de Facebook son de tus borracheras de fin de semana, estás cometiendo dos errores de cara a la empresa. El primero sería que das mala imagen hacia tí mismo y por consiguiente hacia la empresa donde ejerces un puesto de responsabilidad.
La segunda es más grave, y es que, ya que te diviertes de esa forma los fines de semana, al menos sé consecuente y modifica la política de privacidad de tu cuenta en Facebook, ya que de lo contrario, das la sensación de persona descuidada y por tanto, no apta para un puesto de responsabilidad.
2. Persona creativa, emprendedora y con ideas.
Una empresa necesita (y con la actual crisis mucho más) una persona creativa y que aporte ideas. Según el estudio, los empleadores han recordado positivamente a ese 1% de los recién graduados entrevistados que aportaron no sólo ganas de trabajar, sino algunas ideas que estaban dispuestos a llevar a cabo si se les contrataba.
Como ya decía Donald Trump, una persona creativa no suele desmotivarse al tener siempre la mente ocupada. Ser emprendedor dentro de la empresa es una virtud que rara vez se encuentra en un trabajador, por lo que cuando aparece, se suele tener en cuenta para ser contratado.
3. Conocimientos básicos del trabajo, de la empresa y de los competidores.
Hay que hacer los deberes muy bien antes de asistir a la entrevista, por lo se debe estudiar la empresa desde sus inicios, evolución, carencias, etc.. es decir, hazle el análisis DAFO. De esta forma, cuando muestres tus aptitudes emprendedoras y creativas podrás demostrarle que conoces perfectamente las debilidades de la empresa en las que podrías trabajar, así como las fortalezas de las que te podrías aprovechar para competir con los rivales.
Después nos encontraríamos con otros requisitos que se aprecian a la hora de ser contratados:
- Buena actitud y positivismo.
- Demostrar capacidad de liderazgo.
- Dotes de comunicación: Saber expresarte correctamente, no tener miedo a hablar en público, etc..
- Experiencia laboral (prácticas): Tendrán mucho más en cuenta a alguien que haya tenido experiencia en prácticas durante al menos 3 ó 6 meses.
- Habilidad con la tecnología.
- Idiomas.
- Ser una persona proactiva.
